28 noviembre 2007

Her Majesty

Satanás existe: es de Alemania, y es mujer.
Paradójicamente, su nombre es Angela.
Y para rematar, resulta que es vegetariana.
Disfrutad de Arch Enemy:



¿Queréis más?

15 noviembre 2007

Puscifer - V is for Vagina

El nuevo proyecto de Maynard James Keenan, lider de Tool y A Perfect Circle, no podía haber tenido un nombre más horroroso. Sin embargo, su calidad es sobresaliente. Un ritmo pausado, electrónico, narcótico, que recuerda por momentos a Massive Attack, y muy poco a sus otros trabajos. La voz de Keenan, grave y ligeramente distorsionada, resuena suavemente en los oídos mientras nos hipnotiza con cuidadas melodías y bases rítmicas. El gran camaleón del sonido industrial vuelve a la carga con valiosos compañeros de viaje, y su creatividad parece no tener límites.

El mismo Keenan presenta su nueva aventura en Myspace, en donde además puedes escucharla, tal que así:


Welcome to Puscifer, my creative subconscious. Welcome to the party that goes on in my head 24 hours a day. Welcome to my island of misfit ideas. The space where my Id, Ego, and Anima all come together to exchange cookie recipes. This is a space without any hard edges. It's a space with no clear or discernable goals. CHECK YOUR OVER INFLATED EXPECTATIONS AT THE DOOR. Cuz this is simply a playground for the various voices in my head. Come play with us.

Más aquí:

05 noviembre 2007

Sólo un músico


Con retraso, como de costumbre, llega a mis manos La Radiolina, lo último de Manu Chao. Con una gran variedad de estilos, tiene un sonido más propio de Mano Negra que de Chao, aunque pueda resultar hablar de lo mismo. ¿Más de lo mismo? En parte, sí. Pero, por suerte, es lo bueno lo que se repite. Un estilo completamente inconfundible, e inimitable, a pesar de los numerosos seguidores o imitadores, fallidos, a mi parecer.
En el álbum se encuentra Me llaman calle, una canción estupenda perteneciente a la banda sonora de Princesas, y otras pequeñas joyas como Y ahora qué, A cosa y Mamá cuchara, además de su primer sencillo, Rainin in Paradize. En veinte cortos temas, Manu nos expone sus preocupaciones, con un profundo pesimismo por lo que está por llegar, pero, afortunadamente, sin ánimo de impartir doctrina, pues él, sólo es un músico.